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Arquitectos: Enzo Rosada architecte
- Área: 100 m²
- Año: 2021
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Fotografías:Stéphane Aboudaram | WE ARE CONTENT(S) SEGUIR
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Proveedores: Decospan, Diotti, Foscarini, Heytens, Horus, Ligne Roset, Marius Aurenti, Meljac, Zolpan
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El proyecto consiste en rehabilitar y convertir en piso una parte de un almacén del siglo XVIII situado en el puerto de Marsella. Las proporciones palaciegas de los pasillos de la escalera recuerdan una época en la que se subían cargas tiradas por animales.
El reto consistía en inscribir nuestras intervenciones arquitectónicas y estéticas en un relato no sólo constructivo sino histórico, resolviendo al mismo tiempo las paradojas inherentes a la conversión de un uso en otro.
Dos volúmenes dividen el piso entre un espacio diurno acogedor y un dormitorio cerrado y tenue. Dos monumentales ventanas originales iluminan generosamente el salón. El espacio, ahora abierto con espíritu de loft, está unificado por una losa de hormigón. Un chorro del mismo material, cincelado en un lado, forma una isla. La zona de noche se eleva en la parte trasera del piso mediante una plataforma, ofreciendo una vista de pájaro del Viejo Puerto y su incesante ballet de barcos.
La fluidez de la distribución se ve acentuada por la utilización de muebles de roble macizo, cuyo grosor variable sirve de transición entre la zona de estar, revestida de blanco roto, y el dormitorio, envuelto en cortinas opacas. La estructura de madera incorpora todos los elementos técnicos necesarios para la calefacción y el aire acondicionado, así como la cocina con sus electrodomésticos, la biblioteca, el lavadero y el vestidor. Los herrajes de latón ambientan la madera y el hormigón en todo el piso.
El dormitorio, concebido como un espacio íntimo y acogedor, oculta un cuarto de ducha troglodita revestido de hormigón encerado, signo del carácter orgánico de la distribución de los volúmenes del piso. Desde esta suite se abre una perspectiva sobre las líneas de fuga puntuadas por vigas de madera desbastadas. Delimitando el salón, la extrusión de hormigón petrificada en isla del salón evoca un lavabo de lavandera dedicado al disfrute de la conversación.
